Los autodidactas son personas que deciden lanzarse a aprender por sí mismas y de forma independiente. Es una forma habitual, de profundizar en cualquier tema. Sin embargo, también es posible recurrir la formación con maestros o mentores. Elegir entre una u otra alternativa puede resultar difícil, y es por eso por lo que, a continuación, repasaremos una por una las ventajas y desventajas de cada opción.
El aprendizaje autodidacta
Sin embargo, es una forma de aprender que está alcance de todo el mundo y que, en cierto modo, se acaba por practicar casi sin querer. Por ejemplo, si quieres aprender a cocinar basta por empezar a elaborar diferentes recetas e ir solucionando las dudas que vayan surgiendo. De esta forma, se mejora poco a poco, pero dando pasos firmes.
Ventajas de ser autodidacta
• Avanzas al ritmo que tú te marcas. Esta es la ventaja fundamental. No hay presiones internas: solo estás tú ante la materia que quieres dominar. Vas a necesitar iniciativa, curiosidad, orden y disciplina para conseguir tus objetivos, pero si te lo tomas en serio lo conseguirás. Además, podrás planear las sesiones de estudio como mejor te convenga y a la hora del día que quieras.
• Profundizas solo lo necesario. Los estudios convencionales llegan a resultar demasiado amplios y, a veces, no profundizan tanto como sería necesario. Sin embargo, al estudiar de forma autodidacta puedes aprender solo aquello que realmente necesitas o lo que te resulte verdaderamente útil.
• Aumentas tu confianza. Puede que al principio te cueste, en especial de cara a organizarte y encontrar materiales de estudio. Con el tiempo, estos procesos serán cada vez más rápidos y, finalmente, acabarás por agilizarlos. A base de conseguir resultados aumentarás tu confianza, lo que te permitirá hacer frente a retos más amplios.
Desventajas de ser autodidacta
• Lleva más tiempo. Si bien nadie te mete prisa, tardarás más en adquirir los conocimientos. La razón es sencilla: tú eres el maestro y a la vez el alumno. Al buscar los materiales y prepararlos invertirás un tiempo que podrías usar para estudiar.
• No obtienes reconocimiento académico. Este es el gran problema del estudio autodidacta: no obtienes certificación alguna. Por tanto no tendrás un documento que acredite, de forma contundente, los conocimientos que dices poseer. Y ten en cuenta que las palabras se las lleva el viento.
• No es recomendable para todas las áreas del conocimiento. Ser autodidacta puede resultar complicado cuando tienes que enfrentarte a un área muy compleja. En algunas ocasiones necesitarás otros puntos de vista o que alguien te explique un determinado concepto, ya que quizá no seas capaz de comprenderlo. Así que puede que en algunas ocasiones te quedes atascado casi sin quererlo.
La formación con mentores
Contar con la ayuda de mentores es otra modalidad interesante de aprendizaje. En ella no estarás solo, ya que dispondrás de un maestro para transmitirte conocimientos y vivencias. Además, establecerás una relación de amistad con la otra persona que puede traerte diversos beneficios en el futuro cercano. Gracias a su ayuda y guía aprenderás todo tipo de cosas.
Es una formación dinámica y en la que también conocerás las vivencias de la otra persona, algo que no suele estar al alcance de todo el mundo. Asimismo, se da un proceso de desarrollo personal que estará marcado por las habilidades del mentor y su dedicación.
Ventajas de tener un mentor
• Aumenta la comprensión. Al contar con un mentor personal, tienes siempre a tu alcance a un experto que te puede explicar cualquier concepto que no entiendas. De esta forma lograrás un conocimiento más profundo y sistematizado. Y además lo conseguirás en un tiempo reducido, ya que no tienes que encargarte de todos los aspectos de tu propia formación.
• Opciones de networking. Gracias a tu mentor puedes empezar a tejer una red de contactos. Esto te facilitará encontrar oportunidades laborales y avanzar a una mayor velocidad. También tendrás acceso a otros profesionales, que contribuirán a enriquecer tanto tus conocimientos como tu punto de vista.
• Mejora en la comunicación. Siempre tendrás alguien con quien charlar, lo que te servirá para desarrollar tus dotes comunicativas. De hecho, eso te podría ayudar a desenvolverte y explicar mejor las ideas que tengas en mente. De esta forma ganarás en eficacia y no tendrás tantos problemas a la hora de transmitir un mensaje.
Desventajas de tener un mentor
• Desatención. Si tu mentor tiene que atender a otros alumnos, quizás no te preste tanta atención como debería. Por eso es necesario que busques a uno que se involucre en la formación y que no sea excesivamente pasivo. En esas circunstancias podrías salir perdiendo, ya que tu formación se vería ralentizada.
• Incompatibilidades. Quizás tu mentor y tú seáis personas con puntos de vista diametralmente opuestos. Esto puede llevar a más de un roce y a que la relación se enturbie, en especial si no ponéis de vuestro lado para evitar males mayores. Al fin y al cabo, te estarías jugando tu formación.
• Manipulación. Se puede dar desde el lado del alumno y del mentor, pero en ambos casos es igualmente negativa. Puede que el mentor trate de llevar a su tutelado a ver las cosas solo desde sus puntos de vista, deformando la realidad de la materia que enseña. Sin embargo, situaciones como esta son poco comunes, ya que exigen mala fe por una o ambas partes.
Como ves, las ventajas y desventajas del aprendizaje de las personas autodidactas y de aquellas que cuentan con un mentor son muchas. De ti depende escoger la alternativa que mejor se adapte a tus expectativas y necesidades. Así estarás más cómodo y te costará menos avanzar en la materia en la que quieras formarte.